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MISION DE VIDA
En el DOS la relación consigo mismo y la relación con los demás están íntimamente vinculadas a la necesidad distintiva de validación externa.
El DOS se culpa cuando no logra que los demás lo quieran y lo acepten, producto de su necesidad distintiva de validación externa. Cuanto menos valioso se sienta el DOS, más intentará esta validación. Siendo útil a los otros, más se alejará así de sí mismo y perderá el contacto con lo que necesita. Al final se sentirá exhausto y utilizado por todo el mundo. Entonces se vuelve iracundo (que toma del OCHO) e intelectualiza sus necesidades (que toma del CINCO).
El DOS, a fin de no sentirse menos valioso, producto de su necesidad distintiva de validación externa, da compulsivamente. Cuanto más dé, más será percibido como poco genuino.